El pasado día 9 los alumnos de 4ºESO, sus padres y profesores celebramos un acto de despedida de esta etapa. Con una Eucaristía y piscolabis, pudimos celebrar y agradecer todo lo vivido.
Aquí es dejamos el discurso que hicimos los alumnos.
Nos sentimos muy
agradecidos de tener la oportunidad de leer este discurso en nombre de todos
nuestros compañeros. Parece que fue ayer cuando comenzábamos este curso: nueva
clase, nuevos profesores y nuevas ilusiones. A estas inquietudes se unió la
inseguridad de no saber si habíamos elegido bien nuestro itinerario, nuestras
materias y, en definitiva, el camino hacia nuestro futuro. Sin tener ninguna
seguridad, comenzamos esta aventura contando con el apoyo de nuestros tutores
(Bea, Paloma, Cecilia y Vicente), además del resto de profesores y no docentes.
Nuestras vivencias a lo
largo de este curso han sido innumerables. Comenzamos con las convivencias de
principio de curso, lo que nos brindaba la oportunidad de descubrir nuevas
personas. Fue un día entrañable y lleno de buenas vibraciones.
En abril llegó el tan
ansiado viaje de fin de etapa. El primer problema con el que nos encontramos
fue hacer una maleta de un tamaño “razonable”, sin olvidar lo que suponía estar
a las ocho de la mañana en el Colegio (¿verdad Juan?) para poder llegar a la
visita de ese estupendo pueblo de Sagunto y ver sus ruinas. Durante esta
visita, uno de los grupos se perdió por el camino, logrando encontrarse después
de preguntar a varios transeúntes (¿verdad Cecilia?). Desde luego ya estaban
claras las intenciones de los tutores, cuando después de la dura caminata de
Sagunto (todo cuesta arriba), nos llevaron a hacer un tour nocturno por
Valencia. Esta visita sí que dio juego: Paloma nos enseñó cómo evitar dejar tu
móvil a un extraño para hacer una foto y, además, de saber huir si te sientes
acorralado. Después de una noche “privados de libertad”, nos dirigimos a las
actividades náuticas. Sin lugar a dudas esta fue una actividad memorable.
Tuvimos de todo: caídas de barcos (Juan, María Rey, Miguel, Javier García…),
peleas en pádel-surf o los baños en la playa a cero grados (Bea salió ilesa
pero Paloma no tanto…). Agotados de estas actividades, nos enfrentamos a la
discoteca. Ese juego de parejas no acertó de todo o ¿sí? ¿Carlota Tornos y
ejem…? Esa pareja de Valencia ¡Qué lecciones de baile nos dio Mitchell! Esas
patatuquis a modo de re-cena (no eran lays gourmet, lo sentimos Paloma), ese
baile de tutores con compañeros… En definitiva, una noche muy divertida e
inolvidable. El último fue más tranquilo con la visita al oceanográfico y la
vuelta a casa a ritmo de los bailes y las canciones de algún otro Profesor…
Después del viaje, los
chicos de biología tuvimos la visita a las cuevas. En ningún momento, nos
informaron de que la última en la fila siempre desaparece, por este motivo
teníamos a Paula de Castro, Juan Collado y otros valientes que nos cubrían las
espaldas. Muchas gracias por protegernos. Además, nos recalcaron la importancia
de respetar las normas de las cuevas, aunque algunas no lo cumplieran. Dos de
las cosas que aprendimos este día es que los profesores en ocasiones se portan
peor que nosotros y en una visita a las cuevas se puede ir perfectamente con
tacones (¿verdad Iciar y Bea?).
Antes de irnos de
puente de mayo, tuvimos la visita a Toledo. Nuestra llegada fue accidentada por
el fallo de frenos del autobús (¿verdad María Sierra?) pero el día lo
disfrutamos muchísimo.
Tras este recorrido por
todas nuevas salidas, no podemos dejar de lado las múltiples anécdotas que
hemos vivido a los largo del curso. Entre otras cosas: las caídas de Clemente,
el pichiflú y criaturitas de Tino, las persianas no localizables de Bea, la
cueva de Ali Baba de Paco, el corazón que nos ha robado Juan, los kids de
Clara, los veraneantes de Cecilia, las bromas a Carlota Tornos realizadas por
Ricardo o el famoso pino que Paloma asignó a María Sierra… Además de pizarras
caídas ¿verdad Marcos?, percheros movibles ¿Alba? Tarteras volando por la
ventana ¿ehhh, Iván? Retrasos innumerables de Marta Tello, Rioperez, Luis
Hernández... En definitiva, grandes momentos que han hecho de este año un gran
curso.
Por todo ello, por lo
vivido y por lo que esperamos seguir viviendo
¡Muchas
gracias a todos los que habéis formado parte de nuestras vidas durante esta etapa!
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